El norte de la provincia de San Luis se vio azotado por un intenso temporal que dejó a su paso más de 70 milímetros de agua y causó estragos en la localidad de La Calera. Una feroz tormenta acompañada de vientos huracanados, granizo de gran tamaño e intensas lluvias golpeó la zona, dejando a la población sin suministro eléctrico y con importantes daños materiales.

El vendaval de viento, lluvia y piedras del tamaño de un huevo provocó la caída de árboles, ramas y daños en vehículos estacionados. Incluso, la fuerza del viento logró trasladar un tanque de agua de su ubicación original.

Uno de los incidentes más significativos fue la crecida del río local, que derribó una torre de Edesal, interrumpiendo el suministro eléctrico en la zona afectada.

La situación se agrava por la falta de suministro eléctrico en la estación meteorológica local, lo que impide obtener datos precisos sobre la magnitud del temporal, como la precipitación acumulada y las ráfagas de viento.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta amarilla para la provincia de San Luis, instando a la población a tomar precauciones ante posibles tormentas. Se recomienda no sacar la basura, retirar objetos que puedan obstruir el escurrimiento del agua, evitar actividades al aire libre, refugiarse lejos de árboles y postes eléctricos, estar atento a la posible caída de granizo y mantenerse informado a través de las autoridades locales.

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