Un nene de 12 años fue diagnosticado en las últimas horas con muerte cerebral en la ciudad mendocina de Guaymallén, tras recibir un disparo en la cabeza cuando se encontraba en su casa.
El niño fue asistido de una herida de arma de fuego con orificio de entrada en el cráneo en la zona occipital con pérdida de masa encefálica y posteriormente fue derivado de urgencia al Hospital Central donde finalmente falleció.
Tras lo ocurrido, fue detenido un joven de 18 años, quien sería familiar del menor y les dijo a los detectives que se accionó el arma de manera accidental.
Se trata de una pistola calibre 9 milímetros que fue secuestrada y quedó a disposición de la fiscal de Homicidios Andrea Lazo.
Al respecto, la funcionaria judicial aguardaba por el resultado de una serie de medidas a efectos de definir su situación procesal.
El hecho ocurrió alrededor de las 3:40 de la madrugada cuando el joven se encontraba junto a la víctima y otro chico, de 11 años, en un domicilio de calle Pacheco al 8800.
Según creen los investigadores, este habría estado manipulando el arma de fuego y allí se habría efectuado el disparo que impactó en la zona occipital izquierda del cráneo del niño, por lo cual se decidió dar aviso a la línea de emergencias 911.
Agentes policiales llegaron a la escena del hecho y trasladaron al pequeño al microhospital Puente de Hierro de Guaymallén, donde confirmaron la gravedad de la herida de bala.
Frente a ello, los uniformados decidieron derivarlo al Hospital Central a efectos de que reciba la atención médica correspondiente, donde finalmente falleció.
Fuente: SL24
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