El profesor de música del Jardín de Infantes 31, de Neuquén, fue imputado por 17 casos de abuso sexual agravado por su condición de ser el responsable de educación de los niños.

La jueza de Garantías, Carina Álvarez, aceptó los cargos que le hizo la fiscalía y determinó una prisión preventiva por 6 meses. Esta mañana el docente fue llevado de urgencia a un centro de salud por autolesiones que no eran de gravedad, según la información oficial.

La jueza también definió que por la cantidad de damnificados y la complejidad de pericias que habrá que realizar, especialmente por tratarse de menores, es un caso complejo, por lo que el plazo de investigación se prolongó desde los cuatro meses habituales a un año.

El fiscal Manuel Islas sostuvo que "de acuerdo con la información provisoria, los hechos ocurrieron estimativamente en un período comprendido entre marzo y julio del actual año durante el dictado de la clase de música que estaba a su cargo, tanto en el turno mañana como tarde". La acusación se basa en 16 hechos de abuso sexual simple y uno de abuso sexual con acceso carnal.

Pero la situación del docente puede complicarse porque todavía falta analizar mucha evidencia y otras denuncias presentadas por los padres de los niños. Según fuentes del Ministerio Púbico Fiscal, serían unos 40 casos en total.

El fiscal pidió que como medida cautelar, el acusado permanezca detenido con prisión preventiva por un plazo de seis meses ya que existe riesgo de que se fugue. Los planteos del fiscal del caso fueron respaldados por la representante de la Defensoría del Niño y el Adolescente durante la audiencia.

El caso se conoció cuando los padres empezaron a advertir cambios en la conducta de sus hijos: no querían ir al jardín; se volvían a hacer pis encima; lloraban. De acuerdo al testimonio de los más chiquitos, el profe apagaba las luces del aula para tener “relajación” y los invitaba a acostarse en el piso. En esa situación se habrían producido los abusos.

 

El enojo de las familias

La reacción de los papás y las mamás fue de mucho enojo contra el profesor y la institución escolar, ubicada en el barrio Melipal de Neuquén.

Responsabilizan a la conducción del establecimiento de “mirar para otro lado” y “no hacer nada” para controlar la situación dentro del aula. Hubo momentos de mucha tensión y violencia en el jardín, con los padres bloqueando la salida de la directora y tuvo que intervenir la policía provincial. También se registraron incidentes en las cercanías del domicilio del docente abusador.

Al conocerse esta situación, el Consejo Provincial de Educación de Neuquén resolvió separar del cargo al docente imputado; y en forma preventiva, decidió apartar de sus cargos directivos a la directora y vicedirectora del jardín. El objetivo es “preservar la documentación”, dice la Resolución.

El vicepresidente del CPE, Danilo Casanova, expresó que “la situación era terrible por los relatos que manifestaban las familias, padres, madres y abuelos, dando detalles escalofriantes de lo que vivían los chicos con un profesor de música en actividades que se suponían que eran de juegos y en un contexto educativo”.

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