La Cámara de Empresas Pymes del Biocombustible anuncia movilización hacia Buenos Aires ante preocupaciones sobre inclusión desfavorable en la legislación propuesta.

Las pequeñas y medianas empresas (pymes) dedicadas a la producción de biocombustibles en Argentina han expresado su profundo descontento y preocupación por los términos de la Ley Ómnibus que se debate en el Congreso. En respuesta a lo que consideran una amenaza a su subsistencia, la Cámara de Empresas Pymes Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (CEPREB) ha anunciado la posibilidad de llevar a cabo un 'tractorazo' hacia el centro porteño.

La sección IV del proyecto de ley, comúnmente conocida como Ley Ómnibus, ha suscitado fuertes críticas por parte de las pymes del sector de biocombustibles. Temen que la inclusión junto a las grandes compañías multinacionales aceiteras en la legislación conduzca a su quiebra, al obligarlas a competir en condiciones desfavorables.

La movilización, inspirada en el 'tractorazo a la francesa', contemplaría el desplazamiento de camiones cisterna, tractores y trabajadores de las plantas pymes de todo el país hacia Buenos Aires. Este acto simbólico pretende mostrar el rechazo de las pymes a las modificaciones legislativas que consideran perjudiciales para su supervivencia.

Las principales demandas de las pymes del sector incluyen una segmentación que contemple la capacidad de producción y la distancia al puerto de Rosario, así como una limitación en la participación de las grandes compañías en el mercado. Además, proponen aumentar el corte obligatorio de biodiesel y crear segmentos diferenciados para su provisión.

Federico Martelli, director Ejecutivo de CEPREB, subrayó la imposibilidad de las pymes para competir en igualdad de condiciones con las compañías integradas, dada la desproporción en la escala de producción y el control sobre la materia prima. Advierte sobre los riesgos de enfrentar a las pymes entre sí y destaca la importancia del diálogo y la participación de todos los actores involucrados en la búsqueda de soluciones sostenibles para el sector.

En conclusión, el conflicto entre las pymes del biocombustible y las grandes compañías aceiteras refleja las tensiones en torno a la legislación propuesta y destaca la necesidad de un debate profundo y una colaboración entre todas las partes para garantizar un desarrollo equitativo y sostenible del sector.

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