Son los laboratorios de las provincias de Santa Fe y Rio Negro. Es el medicamento que la OMS indica para la práctica del aborto seguro dentro de los límites legales actuales.

En los últimos días, Rio Negro anunció que fabricará en su laboratorio estatal el misoprostol, que es el principal medicamento que se utiliza para la interrupción del embarazo. De esta manera, junto con Santa Fe  -que lo había anunciado con anterioridad-, ya son dos las provincias que desarrollaran para su uso dentro de los límites legales actuales.

En la actualidad en el país el medicamento solo lo produce el laboratorio privado Beta. Al tener el monopolio de su comercialización, el precio de venta ronda los 4.000 pesos

En marzo, el gobierno de Santa Fe comenzó a producir misoprostol para usarlo en los casos de abortos no punibles contemplados por la ley. Lo fabrica el Laboratorio Industrial Farmacéutico Sociedad del Estado (LIF). Están en las etapas finales del proceso y estiman que para diciembre estaría disponible.

La OMS considera que es un medicamento fundamental para garantizar la salud reproductiva de las mujeres.

Días atrás, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología médica (ANMAT) autorizó a un laboratorio nacional a producir comprimidos de misoprostol para uso ginecológico u obstétrico y de venta exclusiva a hospitales.

Se trata del Laboratorio Domínguez y lo tendrá listo para antes de fin de año. La medida se tomó el 2 de julio pasado pero se conoció ayer y casi una semana después de que el Senado rechazó la legalización del aborto.

En Rio Negro, lo producirá el laboratorio público de medicamentos Profarse en Viedma. La gerenta de la empresa estatal, Marne Livigni, precisó que la decisión se tomó luego de un pedido que hicieron concejales del Viedma en el marco del debate, a nivel nacional, del proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).

El inicio de producción está previsto para el año próximo en virtud de que este medicamento debe pasar por un período de estabilidad, de acuerdo a los protocolos de fabricación de todas las especialidades medicinales en general.

Una vez que se disponga la distribución irá directamente a los hospitales donde los médicos podrán prescribirlo con receta archivada dentro de las farmacias de los hospitales rionegrinos, es decir que no tendrá venta en privado.