Rubén Martinat es de Ucacha Córdoba, La mutual no le cubre la compra de las piernas ortopédicas y decidió grabar y subir un video en las redes sociales solicitando ayuda. 

Rubén  sufrió un grave accidente en un trabajo rural, en el 2017, cuando fue sorprendido por una maquinaria. Salvó su vida de milagro y le amputaron las dos piernas. Al poco tiempo volvió a trabajar, con las dificultades del caso, y al volante del tractor o maquinaria en su desempeño como contratista rural. Si bien adquirió unas prótesis, necesita otras más sofisticadas para volver a caminar. Por ello, ante la falta de respuestas de la obra social y numerosas gestiones que hasta el momento no han dado resultados, decidió grabar un video en el que explica su situación y la decisión de abrir una cuenta en Banco Nación apelando a la solidaridad de la gente, con el fin de recaudar y poder adquirir otras prótesis aptas. De hecho, ya probó unas usadas y se entusiasmó, pero tienen un valor de 20 mil dólares cada una.

Consultado, un familiar indicó sin rodeos que “la obra social está dando vueltas y apenas cubrió una parte pequeña de las primeras prótesis que adquirió la familia”. “Hicimos muchas gestiones en Río Cuarto y en Córdoba, contactamos a mucha gente y hasta políticos pero pasa el tiempo y no hay respuestas”, señala uno de sus hijos y agrega que la idea de abrir una cuenta fue de amigos.

“Mi padre probó esas usadas que tienen rodillas especiales y enseguida le agarró la mano; es triste ver que podrían funcionar pero que sean tan caras. Las que tiene no son buenas, se traban y requieren mucha fuerza, por eso en una firma de ortopedia en Córdoba le comentaron de éstas, usadas, que están en buen estado y ya probó. Son electrónicas y puede volver a caminar. Eso es lo que quiere él y toda la familia”, concluye, para remarcar que la cuenta bancaria será sólo para tal fin.

En el mensaje que se viralizó a través de las redes sociales, Martinat dice: “Soy Rubén Martinat. Era contratista rural hasta que tuve un accidente. Pueden ver en las condiciones en que quedé, me agarró un maicero de la plataforma quizás por un descuido mío, no sé. Me tuvieron que amputar las dos piernas; esto fue en el 2017, en agosto, prácticamente terminando la campaña de ese año”.

Sentado en silla de ruedas, agrega sobre lo sucedido: “Lo voy a relevar a mi hijo, a las 5 de la tarde, había un poco de maíz ahí caído y para no dejarlo en el suelo dejamos el maicero moderando y lo pechábamos con la pala. Y no me di cuenta en realidad de que me metía dentro del maicero, hasta que me agarró”.

Alentado por amistades, decidieron buscar ahora esta alternativa. “Gracias a Dios la estoy contando. Es difícil estar en la silla de ruedas; tengo estas piernitas que me hizo una ortopedia, algo puedo caminar pero casi nada porque son fijas. Y bueno, todo lo que es ortopédico lamentablemente es muy caro. Hay unas usadas que me permitirían caminar tranquilo, lento, pero me piden 20 mil dólares cada una.

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