Con solo 10 años, una nena diseñó un dispositivo con una cortina de ducha, bolsas plegables y una pistola de silicona que adhirió a la puerta de la casa de sus abuelos y de esa manera poder abrazarlos tras muchos días separados por la cuarentena.

El aislamiento social impuesto por la pandemia de Covid-19 separó a muchos familiares que no viven en el mismo domicilio y algunos logran soportar esta distancia mejor que otros, pero los niños suelen ser muy apegados a algunas personas y una nena de 10 años se las ingenió para poder abrazar a sus abuelos sin que haya riesgos de contagio.

Paige vive en Riverside (California) y con una cortina de ducha, bolsas de plástico, platos desechables, una pistola de silicona y mucha imaginación, instaló en la puerta de la casa de sus abuelos un dispositivo para poder abrazarlos tras muchos días en los que no pudo hacerlo.

El producto final fue una cortina larga de plástico con cuatro "brazos", dos a la altura de la niña y los otros dos, a los de un adulto, en este caso los abuelos adherida a la puerta con cinta adhesiva.

La nena fue ayudada por Lindsay, su madre, que es enfermera y se encargó de subir el emotivo momento de los abrazos a las redes sociales y se rápidamente se viralizó.

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