El reciente brote de casos de coronavirus en San Luis puso en alerta a toda la comunidad. Es por eso que la Municipalidad de Villa Mercedes dispuso limitar la capacidad de clientes en los súper, comercios, bares y restaurantes, entre otras acciones. El jefe del Programa Control Urbano, Elvio Sepúlveda, sostuvo que las medidas son temporales y que estarán sujetas a lo que determine el Comité de Crisis.

A comienzos de semana, los integrantes del área se reunieron con representantes de las grandes cadenas de supermercados y acordaron que durante los próximos días deberán reducir al cuarenta por ciento la cantidad de gente que ingrese a los locales. "Hay algunos en los que entran hasta ochenta personas o sesenta, pero ahora ese número será mucho menor", señaló Sepúlveda. Además solo podrá ingresar un integrante por familia.

En el caso de los restaurantes, confiterías, bares y casas de comidas, tendrán que minimizarlo al cincuenta por ciento. "Antes solo tenían que ubicar las mesas con una separación prudente para respetar el distanciamiento, pero  también deberán tener en cuenta el número de clientes", añadió.

A su vez, el jefe de programa comentó que en relación a los minisúper orientales y los autoservicios, el cupo de consumidores llega hasta doce.

Sepúlveda recordó que las plazas, diques y parques están cerrados hasta el próximo domingo, al igual que el acceso a los espacios públicos culturales.

Otro de los rubros que se acopló a las adecuaciones es el deportivo. Las canchas de fútbol cinco acompañan la medida. "Coincidimos en que es necesario reducir la utilización de los campos de juego que tienen a disposición a un cincuenta por ciento y con horarios escalonados para que no se crucen cuando terminen", dijo.

La Secretaría de Deporte, Cultura y Turismo se contactó con los clubes. Un gran porcentaje decidió suspender sus actividades por quince días o hasta que se normalice el estatus sanitario provincial. También se contactaron con los propietarios de los gimnasios, que decidieron retomar el ingreso de acuerdo a la terminación de DNI, habilitar el horario corrido para evitar la aglomeración de usuarios y dividir los turnos en grupos más chicos.

Mientras que el equipo de la Secretaría de Desarrollo Social dispuso medidas para trabajar puntualmente en los hogares de ancianos. Los dueños de los doce establecimientos que funcionan en la ciudad y los integrantes del área sugirieron acortar las visitas diarias a una por semana y que solo concurran familiares directos o personas cercanas que vivan en Villa Mercedes.

En todos los casos, los funcionarios remarcaron la importancia de extremar los cuidados y respetar a rajatabla las recomendaciones de seguridad e higiene. "Evitemos circular, que sea solo para hacer cosas necesarias, siempre usando tapabocas, no hay que olvidarse del alcohol en gel y el lavado de manos. Además les pedimos que a la hora de registrar sus datos en las planillas de trazabilidad, sean claros y certeros", destacó el jefe de Control Urbano.

Cafés y bares extreman los recaudos para evitar contagios en el Gran San Luis

Los empresarios gastronómicos ajustan las medidas sanitarias para prevenir contagios y continuar con las puertas abiertas. El cambio más notorio dispuesto por el Comité de Crisis es la reducción de la capacidad de los locales, mientras que intensificaron las tareas de desinfección. “Desde el viernes pasado redujimos la capacidad del local a la mitad de lo que venía funcionando”, dijo Estefanía Sáenz, dueña de la franquicia del café Havanna que funciona hace diez años en Belgrano esquina Vía Rivadavia. Sáenz explicó que en todo momento estuvieron en contacto con funcionarios municipales y de Defensa del Consumidor para cuidar a los clientes y al equipo de trabajo.

Protocolos vigentes. Los empleados hacen cumplir las medidas sanitarias. Foto: Nicolás Varvara.

Dicen que cuando el Comité dispuso la trazabilidad en los locales, los consumidores se mostraron reticentes, pero ante la situación de aparición de nuevos casos de coronavirus esto cambió. “Es para destacar la colaboración de los clientes. Ya no es necesario pedir que se anoten, lo hacen voluntariamente”, dijo Sáenz, y continuó: “Es importante que todos colaboremos para mantener el estatus sanitario y seguir trabajando. Así podemos cumplir con dar un buen servicio y sostener los puestos de trabajo”.

En los municipios del Gran San Luis también tuvieron que reducir la capacidad de los salones. “Actualmente, estamos trabajando a un 25% y estimulamos los pedidos para retirar”, dijo Ezequiel Ferro, dueño de Laterne de La Punta. Y agregó: “Si bien es complicado trabajar así porque la recaudación es mínima, es preferible esto a tener todo cerrado o a tener un foco de contagio”.

Los comerciantes consultados coinciden en que el estatus sanitario se cuida entre todos. "La gente sale poco y lo hace con cuidado. Les pedimos que si desean consumir, pidan delivery", dijo José De Negri, dueño de un bar ubicado en avenida Illia al 300.

"Cuando supe que había nuevos casos decidí cerrar hasta tener en claro las medidas a adoptar para evitar contagios", dijo De Negri, quien tuvo las puertas de su bar cerradas durante el fin de semana pasado para asesorarse correctamente con funcionarios municipales sobre las medidas a tomar para que el estatus sanitario de San Luis no corra riesgo.