Finalmente, los estudiantes de Medicina de la Universidad Nacional de Villa Mercedes (UNViMe) pudieron estrenar sus guardapolvos blancos y acudir al aula para empezar con las prácticas de Anatomía. El lunes fue la primera vez que los chicos y las chicas pudieron tener clases presenciales desde que fue creada la carrera, ya que la cohorte inaugural del año pasado tuvo una cursada totalmente virtual por la pandemia.

Pero la logística no fue tan sencilla. Tuvieron que dividir a los alumnos en diez comisiones de unos ocho integrantes cada una. Desde ayer a las 14 hasta las 20, parte de los grupos fueron entrando y saliendo por turnos cada una hora y media. Mañana le tocará al resto, con la misma modalidad.

"Estamos muy emocionados porque hasta último momento tuvimos la precaución de esperar porque no sabíamos si íbamos a poder empezar con la presencialidad. Después de mucho trabajo, la universidad ha presentado todos los protocolos para estar en las aulas", expresó Humberto Llanos, quien coordina la carrera.

Así, los alumnos empezaron a desfilar por las calles con sus chaquetas características hasta llegar a la sede que la institución tiene en el edificio de la Escuela Nº 9 "Dr. Juan Llerena”, más conocida como "la Normal".

  Cursan las prácticas de Anatomía una vez por semana. La teoría y otras materias son virtuales.

"Estoy emocionada y bastante nerviosa. Fue difícil superar el ciclo de ingreso el año pasado, sobre todo con la cuarentena, pero lo logramos y acá estamos", dijo Giuliana Aguirre, una joven del barrio La Ribera, que aprovechó que Medicina está en la ciudad para empezar su formación profesional.

Marianela Doña, en cambio, viajó desde Río Cuarto para poder acudir a la primera práctica. La chica de 19 años iba a inscribirse en la Universidad Nacional de Córdoba para estudiar, pero su padre trabaja en Villa Mercedes y vieron una buena oportunidad para reducir los gastos.

"Esperamos mucho esto, se luchó demasiado para llegar a la presencialidad. Por eso creo que se debería priorizar el estudio ante cualquier cosa, que no se olviden que el estudiante es el futuro del país", planteó.

En tanto Débora Arias, también de la provincia vecina pero de la localidad de Río Tercero, llegó para cumplir un anhelo que carga desde la adolescencia. "Me atrajo la forma en que uno puede contribuir con el paciente, al prójimo. Hay muchas formas de ayudar, pero siento que esta iba más conmigo", dijo con entusiasmo.

De ahora en más y, mientras la situación epidemiológica lo permita, los alumnos tendrán las prácticas de Anatomía una vez por semana, aunque las teorías y las otras materias (Química biológica e Histología) continuarán con el cursado virtual.

"Necesitábamos tener este contacto directo con ellos y no solamente a través de la pantalla. Porque cuando ellos se desempeñen como profesionales hay diagnósticos que nacen de la observación, desde cómo el paciente camina y entra al consultorio, hasta la inspección física y la información que él mismo nos puede dar en el interrogatorio", valoró Llanos.

Son unos ochenta los estudiantes que harán los prácticos, entre los que realizan el primer año y algunos de la camada pasada.

MÉDICOS LOCALES EN LAS CÁTEDRAS

 La UNViMe contrató a varios de los docentes que dictan las materias en la prestigiosa carrera en Córdoba. Pero el coordinador, Humberto Llanos, señaló la importancia de tener médicos locales en las cátedras: "Se han sumado cinco especialistas, que a su vez se forman con sus pares que ya llevan varios años en la actividad educativa", expresó.

El reconocido neurocirujano Pablo Barbeito es uno de los jefes de trabajos prácticos de Anatomía: "Esta materia sienta las bases para el resto de las asignaturas sobre cómo funciona el cuerpo humano y cómo se relacionan las partes entre sí", indicó.